A principios del siglo XX, en 1918, una epidemia de influenza mató a más de 20 millones de seres humanos. En años recientes, entre 2009 y 2010 la pandemia de influenza mexicana alarmó al mundo temiendo que la historia de muertes se repitiera nuevamente pero gracias a la actuación de las autoridades de salud y del ejército, así como a la inusitada disciplina de la población, los casos sólo llegaron a los millares y la mortalidad apenas sobrepasó las 1000 personas.
Sin embargo, como todos sabemos, en marzo de 2020 se declaró una pandemia por un tipo de coronavirus denominado SARS-CoV-2 y que, a la fecha, aún sigue causando contagios y decesos en todo el mundo.
Durante la historia de la humanidad, han existido enfermedades terribles cuyas curas eran totalmente desconocidas hasta que científicos de la talla de Leewenhoek, Pasteur, Koch, Roux, Behring y Finlay, entre muchos otros, establecieron el camino para el entendimiento de los microbios y la búsqueda de vacunas que combatieran las enfermedades causadas por éstos.
Fue Anton van Leeuwenhoek, un comerciante holandés, quien a fines del siglo XVIII construyó las primeras lentes con las que descubrió la existencia de seres diminutos conocidos en la actualidad como microbios. Con los trabajos del padre italiano Spallanzani, del científico francés Luis Pasteur y del médico alemán Roberto Koch, se descubrió que muchos de estos seres eran los causantes de varias enfermedades epidémicas. Es enorme la cantidad de científicos a quienes hoy en día debemos la cura y en algunos casos de la erradicación de enfermedades tan horribles como la viruela negra que azotó a Europa durante la Edad Media.
Veamos un poco sobre la viruela y la cólera, su cura y a quienes debemos este gran beneficio.
Viruela
Fue una enfermedad que se caracterizaba por erupciones en la piel que llegaban a producir deformaciones e, incluso, la muerte. Estuvo presente en el mundo desde el año 10,000 a.C. hasta 1980, año en el que después de intensas campañas globales de vacunación, la viruela se declaró como la primera enfermedad en ser erradicada en el mundo. El virus que la ocasionaba se conoce como variola virus.
Durante siglos su contagio se debió al contacto directo con las llagas de los enfermos, con su respiración e inclusive con sus prendas y demás objetos que hubieran tocado. La mayoría de los contagiados morían en la segunda semana del contagio y muchos de los sobrevivientes conservaban cicatrices en su piel. La viruela fue causa de epidemias en Europa como la del siglo XVIII y en América en donde se le conoció como hueyzahuatl o lepra grande.
La primera vacuna moderna para esta enfermedad se debe al médico inglés Edward Jenner que la dio a conocer en 1796. En un principio el médico rural comenzó a vacunar a la población de la localidad donde vivía, pero con los años, sus beneficios se popularizaron al grado de que los nobles ingleses comenzaron a vacunar a sus familias e incluso Napoleón Bonaparte ordenó que su tropa fuera vacunada en 1805.
Durante la segunda mitad del siglo XX, hubo intensas campañas de vacunación con el objetivo de erradicar la enfermedad, lo cual se logró finalmente en 1980. Y aunque el variola virus ya no se transmite entre los seres humanos, se conservan muestras de este virus en Estados Unidos y en Rusia para su estudio.
Cólera
Es una enfermedad intestinal aguda
que produce diarrea en forma de arroz con un terrible olor a pescado y puede
provocar mucha deshidratación. Se transmite por la bacteria Vibrio cholerae y se adquiere por la
ingestión de agua y comida infectada. En el mundo se enferman entre 1.3 y 4
millones de personas con una mortalidad de hasta más de 100,000 casos al año.
El médico italiano Filippo Pancini fue quien descubrió los bacilos en 1854 y el médico español Jaime Ferrán Cluá quien preparó la primera vacuna contra el cólera 30 años después. Por cierto que Ferrán también descubrió las vacunas contra el tifus y la turbeculosis. ¿Qué tal?
En 1893 el bacteriólogo alemán Waldemar Haffkine desarrolló una vacuna con menos efectos secundarios y en 1896 el bacteriólogo alemán Wilhelm Kolle introdujo una vacuna más fácil de preparar. En la década de 1990’s se desarrolló una vacuna oral.
Como hemos visto, en la actualidad ya nadie se enferma de viruela y la enfermedad de cólera se produce en regiones con poca sanidad en el tratamiento de agua y de alimentos. Una buena higiene y un mejor nivel de vida en el mundo podrían ayudar a erradicar el cólera también, lo bueno es que al menos se cuenta con vacunas para ambas enfermedades gracias a la constante investigación científica.
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